ねじまき鳥さん

on martes, 19 de enero de 2010
Por qué no he escrito últimamente, me preguntarán. Bueno, la verdad es que cuando te la pasas encerrado en casa sumergido en la web, tal vez no se tenga mucho material interesante para hablar, al menos por aquí (para eso está Twitter). Tal vez lo único relevante sea que mi querida universidad, el Instituto Tecnológico de Veracruz, se haya hecho de una fama de troll tan grande en tan solo horas, ya que ha dejado a todos ansiosos esperando por la lista de horarios de inscripción. Qué difícil es tratar de escribir algo aquí, iniciar y/o mantener viva una conversación por MSN, pensar algo interesante que twittear... me siento como en el límite de toda la inactividad que puedo alcanzar y quiero empezar a revertirla. Aunque hoy di un pequeño paso gracias a una sugerencia del buen Ethark, necesito otros empujoncitos para agarrar ritmo. La escuela no empieza hasta dentro de dos semanas (si es que no es otro troll), y al menos ya tengo mi horario planeado. Tal vez tenga que tomar una materia que no quería tomar hasta el semestre entrante para que no quede tan vacío, pero ya veremos.

De alguna manera la soledad ya no me ofrece esa sensación de comodidad que solía, es como cuando un sofá empieza a aguadarse por el uso y hay que cambiarlo por uno nuevo. O sea que, en ese sentido, tengo que lograr una "nueva soledad". ¿"Nueva soledad"? ¿Qué me suceda? What does that even mean? Tal vez sólo un cambio en la graduación, la intensidad; giraré la perilla hacia la izquierda cual termostato para ir reduciendo el dominio de la soledad en mí. ¿Deberé encerrarme en un pozo como hizo el protagonista de "Crónica del pájaro que da cuerda al mundo"? ¿Deberé someterme a pruebas similares? Espero no escuchar a ese pájaro mientras viva a menos que traiga buenas noticias. La ventana amanece empañada y lo fácil que era antes escribir algo ahora se vuelve una decisión que toma mucho tiempo y termino desistiendo. Me resulta difícil escoger golosinas en la tienda. Gracias a la medicina paso buena parte del día con los sentidos un poco aumentados (supongo que ese debe ser su trabajo siendo una ayuda para el TDA) y me gusta jugar a aprovechar eso, aunque después acabe con un escalofrío constante en la cabeza. Antier tuve una pesadilla a la cual no le encuentro causa. En fin, que lo único que merece la pena mencionar ha sucedido en mi cabeza por efecto de la atomoxetina. Oh pájaro, si le das cuerda al mundo, ¿le das cuerda a todos los que habitan en él por igual? Tal vez así sea, y creo que como van las cosas, se está acabando la cuerda y pronto habrá que girarla de nuevo

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