Medley

on sábado, 3 de septiembre de 2011
aterrorizado a morir de seguir de seguir y tu silueta, sí, la sigo buscando, como para regresar a nuestros tiempos poniendo los pies donde deberían, y ahora ha pasado bastante desde que te vi sonreír, así que nadie alce la voz, por qué no mejor salir a la calle y bailar, y quitarme de dudas, de que tal vez no sepas qué hacer, de que tal vez tengas miedo de decir lo que me gustaría escuchar, ambos sabemos que nos dejaremos llevar como en nuestros sueños, así que mejor nos secuestramos el uno al otro, y cantemos nuestras canciones, pues no tenemos solamente una, y entonces empezaré diciendo que amarte es lo mejor del mundo, que me da oportunidad de ser yo mismo y cantar, cantar, que has venido a salvar mi vida otra vez y que seré tu suporte, cuando sientas que nadie alrededor te entiende, que tus sueños se perderán en el mar, y reiremos con historias acerca de niños caníbales, nos burlaremos de los demás que viven desgraciados e ignorantes de lo bonito que es esto, de que te guste cómo soy y contestarte qué bueno qué bueno, y continuarás diciendo que sueñas con cocinar postres de manzanas y hacerme aun más feliz, y sabré que eres todo lo que podría necesitar, me alimentarás con alambres y tomates y de vez en cuando nos iremos juntos a sábanas limpias que nos harán sentir más que seguros el uno con el otro, y entonces te levantaste de repente y te fuiste, y como no puedo odiarte continué amándote, pensando a ratos que al mundo ya no le importa el amor y ya no lo entiende, después de tanto volar me quedé sin alas y hay que asimilarlo como bueno, que hay que volver a como éramos, dices, antes de iniciar la travesía, a tu manera, a mi manera, siendo mi manera la que ya no quiero, y entonces guardar las palabras no dichas, no dichas, para tal vez decirlo todo, como desbordado, algún día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario